A veces un asco,
un asco de la vida.
se mete, sin apenas preguntar,
en los bolsillos
del alma más escondida.
Mientras a fuera
escora
un barco de papel,
por los mares endebles
de la biografía
más mortal y
ficticia.
Dando, así por hecho,
desde cada hecho
que vivir es tan solo
un breve trecho,
y no por ir a tientas o
muy derecho
se le saca buen provecho.
Dani T. D. 24/11/2020
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