viernes, 24 de marzo de 2023

LOS VIERNES PROMETEN


    Los viernes prometen. Los viernes naufragan embriagados en las playas de la esperanza más extasiadas. En ese día tan especial de la semana hago listas mentales. Listas en donde un humilde servidor va apuntando cosas sorprendentes para hacer (o deshacer, quien sabe...)

 Los viernes son días indicados para robar un banco, y salir corriendo con la pasta hacia Andorra, por ejemplo. Quedar con amigos o sólo y emborracharse hasta perder la razón. Deshacerse de una puta vez de las cadenas invisibles que propician la condición de esclavo. Los viernes son días geniales para enamorarse, para componer una canción, para andar hasta París, para descubrir al fin que se esconde tras esta niebla espesa que constituye la asombrosa y a la vez confusa realidad.

  Hoy es viernes, y he venido hasta este hotel imaginario con vistas al mar. Me he puesto a escribir. Persigo un punto de inflexión. Quiero cambiar el rumbo, pero no sé a dónde ir. 

Lo más seguro es que vivir al fin sea ir a ninguna parte.

  Supongo que estas lineas me ayudarán a ver las cosas con más claridad, suponiendo que haya algo que ver.

  Como la habitación de hotel en donde estoy es imaginaria, de vez en cuando levanto de la cabeza y doy un barrido con los ojos por la oficina en donde estoy trabajando. Y de paso tecleo el ordenador, mientras los relojes avanzan por este fantástico viernes con sabor a limón, ron y a gaviota alegre y algo desorientada...

  Vivo dos realidades paralelas, y como decía San Agustín, estoy al cien por cien en cada una de ellas. El hotel parece muy acogedor. Me sirvo otra cerveza. El alcohol no es muy bueno para la salud, pero trabajar tampoco que digamos. Y más por un sueldo de risa, para no decir de mierda.

Pero a lo mejor hay cosas peores. Claro, que ahora no caigo.

     Así que para no saltar por la ventana, me he instalado en esta habitación de un hotel imaginario para escribir sobre los viernes que no dejan de ser extasiados estados anímicos.

  Luego tal vez me tome un analgésico acompañado de una jarra de cerveza en un bar que mi corazón conoce, o desconoce. Que esa es otra.

Dani T. D. 24/3/2023

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