POR LOS TEJADOS

Esta  nada tan cotidiana que me despeina el alma,
estos ojos azules que me dan la espalda como quien araña mi tan náufrago corazón,
este frío que cala sólo los besos que jamás se dieron,
esta sombra de los sueños derramada como tinta china por el papel de toda ficticia y mortal biografía.


Esta existencia que con demasiada frecuencia
aún sabe a extraña y a lentejas descongeladas,
este país que finge ser el mío 
                                 (como si hubiesen países de alguien)
mientras yo no finjo el orgasmo que no tengo
sobretodo
cuando desenrollan entrecruzándose los mil trapos que presumen ondear,
unos y otras sobre esta piel de toro ya tan desfasado,

Esta tan cultivada ignorancia que trafica ya en conocimiento
de arriba a bajo y de norte a oeste de la red,
esta moda sordomuda y completamente ciega de lo políticamente correcto,
esta guerra absurda, decadente y tan peligrosa de naZionalismos.

Este eterno retorno que tan recitaba ese neurótico de Nietzche,
estos versos de tornillo que hoy
ya se me disparan tan a boca jarro contra nada en concreto,
esta palabra, estas lenguas, estos latinismos, esta duda que duda de casi todo
y de casi nada.

Este tan alegre cansancio que me permite desafinar a mis antojos en los ratos de ocio,
esta decepción tan indispensable para levantarse de nuevo
de la tumba,
este Dios que jamás ha existido y se cree
-aún, a día de hoy-
el poder más supremo,
estos humildes diablos del más de acá  que me ofrecen unas cervecitas y unas cuantas caladitas.

Estos himnos para morir de asco y aburrimiento,
estos políticos que les importa un caraJo la gente como tu , ella o yo,
estos obispos violadores, corruptos y peligrosos ¿por que no se suicidan de una buda vez?
Estos cuatros capos que controlan este mundo ¿saben amar? ¿Saben llorar? ¿Respirannn????

Estos años ya vividos me sirven de casi nada,
estas horas que me llevan a tus labios tan afilados al sindicato del deseo más prohibido,
este misterio, esta Belleza que me despierta todavía,
esta incertidumbre que me acompañará ya para siempre, para nunca...

Este gato que ya se va por los tejados de esta ciudad tan de nadie...

Dani T. D, 28/10/2018