andando por este desierto
lleno de puertas de aire corrompido
que no conducen
a ningún lugar.
Hay policías con dudas
de alquitrán y tocino,
mientras críos
mientras críos
con el rostro nublado
desafinan cualquier melodía
que trate de apaciguar
su tan ansiosa ansiedad
sin claras respuestAs.
su tan ansiosa ansiedad
sin claras respuestAs.
Hay banderas que vomitan
sobre otras banderas,
mientras el presidente
de la comunidad de Pepinos
nunca preside lo que
hay que presidir.
Hay las calles que
al fin nuestras serán
y al fin tendré un piso
y sólo pagaré con
mi patriotismo polasco,
y con la gracia de mi Morenita.
Y por último
hay quien también,
hay quien también,
desde su ignorancia más íntima,
grita unidad ibérika,
grita unidad ibérika,
con tintes neardentales
contra sus íntimos enemigos
los catares.
Pero tampoco,
en absoluto,
me convencen.
O sea lo de siempre,
mientras no avanzo
por este desierto
lleno de rostros de nadie
y tan despeina2,
y tan despeina2,
como el mío.
Dani T. D. 6/11/2019
No hay comentarios:
Publicar un comentario