como escapando de la herida más vulnerable,
como anhelando un aliento de luz con sentido,
como muriendo a cada minuto inexorable.
Así voy y vengo sin saber bien hacia dónde,
batiendo a cada paso el azar que se burla
del destino mortal, escrito regularmente.
Entre el ahora mismo y el jamás que ya se curva.
Al fin soy un verso equivocado
que tu corazón ha rozado,
en un fugaz trayecto apasionado
y qué importa lo que venga luego.
Así sueño bien despierto contra gigantes
batallas, que nunca doy por perdidas.
Compartiendo risas y placeres con mis semejante
para que al fin nunca de sentir completamente me despida.
Dani T.D, 30/6/2019