No quiero volver a ninguna idiota normalidad
que vaya ahogando los días en leyes
que favorezcan a los más poderosos
e hijos de la tercera fase.
No, no quiero volver a ninguna aburrida realidad
que me haga creer que todo progreso
es necesario para conquistar
un estado que sea la hóstia en vinagre,
controlado por la banca
Vaticana.
controlado por la banca
Vaticana.
No vull tornar a cap realitat manipulada
pels mateixos mateixos fantasmes de merda
i de sempre.
Els mateixos fills de la Moreneta
que patrocinen les crisis perpetues
de les primeres necessitats.
Els mateixos fills de la Moreneta
que patrocinen les crisis perpetues
de les primeres necessitats.
Y no, no necesito héroes
ni dioses ni mierdas
de esas tan institucionales.
Ni banderas, ni países, ni fronteras,
me basta con soñar bien despierta
hasta el último aliento más misterioso y liberador
de toda supuesta normalidad.
No quiero volver a ninguna monárquica realidad,
ni a ningún simulacro de democracia.
Lo natural es la anarquía.
Es decir,
la responsabilidad individual ante la colectividad
lo natural es la vida antes de la muerte,
que a menudo no estoy nada seguro aun
de haberla encontrado.
Dani T. D, 17/05/2020
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