Hoy me dispongo a salir A las calles de mi interior. Exteriormente, suspendo la vida por unos días o semanas. Bueno, o meses. No estoy triste, al contrario. Pero necesito un breve exilio de la existencia. No sé como contarlo. Cada vez entiendo menos cosas. Pero la vida no es para entenderla, es para vivirla. Y vivir és poder soñar en directo, y para ello hay que caminar hacia el interior de uno.
No sé que voy a encontrar, a parte de un par de canciones de Lou Red y, la foto de unos ojos de mujer tocándome el corazón desnudo. Volveré con más fuerza, con proyectos nuevos y tal vez con nuevas amistades y, algún que otro, nuevo amor. Lo más seguro es que vea de nuevo a mi amigo Fernando Pessoa vestido de Bernardo Soares. De hecho a noche cené con los dos, y volvimos a a disfrutar de una gran velada. Entre vino, tabaco, poemas, recuerdos inventados... El propio Pessoa me dijo que tal vez para vivir realmente hay que exiliarse de la propia vida.
Esto me dejó pensativo hasta ahora mismo. Ahora que redacto estás líneas para tal vez ordenar mis pensamientos. Y ya de paso provocar el destino que me espera fuera de mi fumando una nube de arena.
Y es que siempre queda lo mejor por llegar. O quien sabe...
Daniel Torralba 16/7/2016